25 abril, 2016

El levantamiento de Pascua y la independencia de Irlanda

El 24 de abril se conmemora en la el aniversario del alzamiento de 1916 que fue hecho fundante de la independencia del país.

Tomás Ryan

@TomyRyan

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Durante siglos los ingleses ocuparon y gobernaron la Isla de Irlanda y fueron muchas las resistencias que tuvieron que sofocar para mantener su control. Se dice que los primeros invasores británicos llegaron en el siglo XII iniciando un conflicto que aun hoy persiste en otros planos.

La dominación inglesa tuvo varias formas y aspectos, siendo el religioso (protestantes ingleses contra católicos irlandeses) el más notorio. En ese sentido, el Levantamiento de Pascua de 1916 forma parte de la gran tradición de resistencia nacionalista de los irlandeses.

El alzamiento

El lunes 24 de abril de 1916 se produjo un levantamiento armado conocido como “Levantamiento de Pascua” en el ciudad de Dublín. Mil seiscientos irlandeses bajo las órdenes de la Hermandad Republicana Irlandesa y los Voluntarios Irlandeses (luego conocidos como Irish Republican Army -IRA-) se rebelaron contra el gobierno británico en la isla, logrando el control momentáneo de la ciudad y proclamando la República de Irlanda. En ese mismo momento, medio millón de irlandeses peleaban bajo las filas del ejército británico en la Primera Guerra Mundial.

Esa mañana, las acciones de los rebeldes se centraron en la toma y control de varios edificios públicos, siendo la ocupación de la Oficina General de Correos el punto más importante. Fue allí donde flameo por primera vez la bandera verde, blanca y naranja (actual bandera de la República de Irlanda). Luego de declarar la independencia, se leyó la proclama de los rebeldes que constituían un gobierno provisional de la nueva república.

El levantamiento tuvo escaso impacto en el resto del país y solo se redujo a la toma de algunos edificios públicos. Para la mayoría del movimiento nacionalista irlandés, esa acción carecía de sentido y solo había que esperar a la reacción inglesa para que la rebelión fuera liquidada. Poco preparada y con escaso apoyo popular, el alzamiento estuvo condenado al fracaso.

La respuesta inglesa fue sangrienta, no solo contra los rebeldes sino contra la ciudad entera. Frente a la resistencia, se emplearon armas de artillería destruyendo varios edificios. Luego, una ola de persecución contra todos los sospechosos nutrió las cárceles y campos de concentración en Gales y los principales líderes fueron fusilados.

De la rebelión a la Independencia

La represión y los fusilamientos tuvieron un efecto no deseado para la corona Británica. Amplios sectores del pueblo irlandés que no había respaldado la rebelión incrementaron sus demandas independentistas. Los partidos nacionalistas logran representar este sentimiento en las elecciones de 1918. Allí, nucleados en el partido Sinn Fein (“Nosotros Mismos”) obtuvieron 73 de los 106 escaños correspondientes a Irlanda en el Parlamento británico.

Estos nuevos diputados se rehusaron a ir a Londres, constituyeron en Dublín la primera asamblea Irlandesa (Dáil Éireann) y formaron un gobierno presidido por Eamon de Valera.

En paralelo, proliferaron conflictos armados minando la dominación Británica en la isla generando entre 1919 y 1922 una prolongada guerra de guerrillas por la independencia. Es en este momento donde el IRA cobró un protagonismo importante.

La guerra concluyó con una tregua en 1921 y la creación del Estado Libre Irlandés en 1922. Sin embargo los conflictos no terminaron ya que parte del movimiento nacionalista consideró que el nuevo Estado no había cortado todas las sogas que lo ataban a la corona. Es así como se vivió en Irlanda una guerra civil hasta el año 1923.

De locos a Mártires

Los líderes que iniciaron el levantamiento el 1916 fueron considerados imprudentes por la mayor parte del movimiento nacionalista. Por su falta de preparación y apoyo popular, sus acciones fueron vistas como demasiado osadas. Sin embargo, su accionar fue un cimbronazo que despertó nuevamente los fuertes sentimientos independentistas de la mayoría del pueblo irlandés.

Los líderes fusilados fueron entonces recuperados como mártires de su pueblo y ejemplo de que se podía luchar contra los invasores.

Si bien recién en 1949 el Estado Libre se convirtió en una república totalmente independiente, los sucesos desencadenados por el levantamiento de 1916 fueron de gran importancia para avanzar en la liberación del pueblo y el establecimiento de su república.

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