13 abril, 2016
Una mujer embarazada internada tras la represión a los manteros
Este martes, un operativo conjunto de la Policía Federal y Metropolitana reprimió a trabajadores manteros de la Ciudad de Buenos Aires que previamente habían sido desalojados de sus puestos de trabajo. Además de cuatro detenidos y varios heridos, una mujer embarazada terminó internada.

Este martes, un operativo conjunto de la Policía Federal y Metropolitana reprimió a trabajadores manteros de la Ciudad de Buenos Aires que previamente habían sido desalojados de sus puestos de trabajo. Además de cuatro detenidos y varios heridos, una mujer embarazada terminó internada.
La mujer debió ser internada en el Hospital Álvarez producto de los golpes recibidos durante la represión. Por otra parte, los detenidos fueron trasladados dos a la Comisaría N ° 50, en Gaona 2738, y los otros dos al destacamento de la policía metropolitana, ubicado en Guzman 396, en Chacarita.
«Como es de público el conocimiento el Gobierno de la Ciudad junto a las fuerzas de seguridad viene aplicando un método represivo contra quienes se manifiestan en las calles, militariza los barrios buscando mafias, narcos y delincuentes, y terminan siempre reprimiendo a los trabajadores», denunciaron desde la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP).
Asimismo se preguntaron «¿qué mafia hay en una compañera embarazada que vende sus productos para llevar el pan a su casa? ¿Qué delincuente hay en una compañera que se desplaza en una silla de ruedas y todos los día arma su manta en la calle? ¿Qué opción hay para estos trabajadores que se inventaron un trabajo para poder sobrevivir a un sistema que hambrea, excluye y mata?».
Finalmente, la central que reúne a las y los trabajadores de la economía popular repudió que «un gobierno con medidas improvisadas pretende que los trabajadores manteros se arreglen en un galpón», cuando allí «no entra ni un mínimo porcentaje de la cantidad de compañeros que barrieron de todos los barrios de la ciudad». «La CTEP expresa su mayor repudio a la violencia ejercida ayer y comunica que continuará organizandose junto a los más humildes, por trabajo digno», concluyeron.
Como señaló Federico Dalponte en Notas, el más antiguo de los argumentos esgrimidos por los propietarios es que los manteros venden productos baratos porque evaden impuestos y eso, en definitiva, los pondría en una posición ventajosa. Sin embargo, en el rubro comercio existe, al menos, un 30% de trabajo no registrado lo cual también supone una «competencia desleal».
A esto hay que sumar que, en un comunicado del 21 de enero, la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) denunció que detrás de los manteros hay “mafias organizadas que desarrollan un sistema de trabajo esclavo”.
En ese sentido, Dalponte se pregunta: «Si los comerciantes-propietarios encabezan en realidad una lucha contra la explotación laboral, ¿por qué entonces reclaman el desalojo violento de esos trabajadores, tan víctimas de los abusos como sus propios empleados no registrados? ¿Tendría entonces alguien el derecho –igual y proporcional– de irrumpir con la policía en un comercio de la calle Florida para combatir el trabajo «en negro»?».
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