30 diciembre, 2015
Masiva movilización de trabajadores petroleros
Unos diez mil trabajadores del petróleo marcharon el lunes pasado en Comodoro Rivadavia. Reclaman la continuidad de las políticas en el sector hidrocarburífero para mantener los puestos de trabajo.

Unos diez mil trabajadores del petróleo marcharon el lunes pasado en Comodoro Rivadavia. Reclaman la continuidad de las políticas en el sector hidrocarburífero para mantener los puestos de trabajo.
La nutrida convocatoria recorrió el centro de la ciudad chubutense, partiendo desde la antigua sede del sindicato hasta llegar a la catedral de San Juan Bosco, donde le entregaron un petitorio al obispo Gimeno Lahoz. En el escrito se exige al Ejecutivo nacional, y especialmente a su ministro de Energía Juan José Aranguren, la continuidad en las políticas petroleras.
Durante los últimos años, el Estado estableció un precio específico para el barril de petróleo que se encuentra por encima del valor internacional del mismo. El objetivo de esa forma de intervención en los mercados es estimular la inversión en un área de por sí compleja.
El acta que fija el precio del barril vence a fin de año y el nuevo gobierno aun no dio señales de querer renovarla. De aquí la preocupación de toda una ciudad cuya actividad comercial depende exclusivamente de la suerte de este sector.
Por esta razón, los trabajadores exigen que se mantengan las numerosas perforaciones que representan una cuantiosa mano de obra y que a su vez significan la posibilidad de desarrollar una industria energética nacional que permita terminar con la dependencia en un mediano plazo.
1998
La comunidad de Comodoro Rivadavia, y especialmente las familias que dependen de la industria petrolera, tienen marcado en la memoria ese año. En aquel momento el precio internacional del petróleo se desplomó, produciendo una ola de despidos sin precedentes en una ciudad en la que la producción de hidrocarburos es vital.
No solamente se vieron afectados los que, en ese entonces, trabajaban directamente para YPF-Repsol. Toda la actividad económica, desde el sector rural hasta el inmobiliario, se paralizó. Este duro recuerdo se mantiene latente y fue evocado en la movilización del día lunes.
En declaraciones al sitio El Patagónico, el sindicalista Jorge Avila afirmó: “No vamos a dejar que pase lo del 98; lo que les pasó a nuestros padres. Vamos a defender la YPF del Estado y los puestos laborales de todos».
La demora
Más allá de los antecedentes, la preocupación de los trabajadores radica en la falta de definición del gobierno nacional. Hasta ahora, retrasó la decisión de mantener el precio del crudo intervenido o de que al mismo lo establezcan variables internacionales.
El intendente Carlos Linares, del Frente Para la Victoria (FPV), participó de la concentración y se lamentó de la falta de claridad para las políticas nacionales por parte del macrismo. En este sentido, aseguró: “Vamos a seguir peleando todos los días. No queremos que quede gente en la calle y la vamos a pelear como prometimos; no vamos a resignar todos los logros que hemos obtenido».
Una vez en la catedral, se entregó en manos del obispo el petitorio que advertía: “No pensamos volver a los tiempos de la libertad de mercado que transformó a Comodoro Rivadavia en la capital nacional de la desocupación y a los trabajadores y sus familias en las variables de ajuste en nombre de la competitividad”.
Aunque no participó de la misma, el gobernador de Chubut, Mario Das Neves, brindó su apoyo telefónicamente. Sí estuvieron presentes los referentes de todo el arco sindical petrolero como los diputados provinciales del FPV Viviana Navarro, David González y Carlos Gómez.
Santiago Lecuna – @santirayado
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