Continúa el conflicto en Cresta Roja y peligran 5 mil puestos de trabajo

Trabajadores de Cresta Roja, marca de la empresa Rasic Hermanos, denuncian que la compañía cerrará las tres plantas que posee en el país lo que provocará alrededor de cinco mil despidos. Se trata de una compañía de capitales nacionales, segunda en la comercialización avícola en la Argentina.

Silvio Etcheun, secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Carne del Gran Buenos Aires (Sicgba), dijo en Radio Continental que la compañía aduce que dejó de ser rentable. Según su mirada, Cresta Roja acompañó «todas las medidas regulatorias impulsadas por Sergio Moreno [ex secretario de Comercio Interior]» y la suspensión de los subsidios del Estado la llevó a la situación en la que se encuentra hoy.

Hasta el momento, son 680 los telegramas de despido que efectivamente llegaron a los empleados, pero desde el sindicato aseguran que con el llamado a quiebra ese número se multiplicará y alcanzará a los cinco mil trabajadores.

«Esto no es solamente un conflicto laboral, es un conflicto global que requiere una solución de conjunto», dijo el secretario general de Sicgba y demandó también a sus pares sindicalistas de otras ramas de la industria vinculadas al sector como al «Momo» Venegas de UATRE, o Pablo Moyano de Camioneros un involucramiento activo en el conflicto.

“En el 2009, el sector vivió una expansión desmedida gracias a los subsidios del Estado en distintos puntos de la cadena productiva», explicó Etcheun. Pero a fines de 2011, al verse suspendidas las compensaciones, la economía del sector, según su opinión, se empezó a complicar.

En la industria de la carne, contó el sindicalista, cerraron 136 frigoríficos bovinos desde entonces, con una pérdida de 121 mil puestos de trabajo como consecuencia. Además, esto replicó en los precios de venta al consumidor: hace 15 días el cajón de pollo (20 kilos) costaba alrededor de 270 pesos y hoy se encuentra en 370 pesos, un 28% de aumento.

Ya desde el año pasado Cresta Roja viene siendo el territorio de un intenso conflicto, con tires y aflojes entre la empresa y los trabajadores, con la mediación del Estado a través del Ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires, que había incluido el despido de 1300 y posterior reincorporación de 650 operarios. Desde entonces los trabajadores cobran  irregularmente sus salarios y se encuentran en una situación de incertidumbre que se agravó con los más de 600 despidos de las últimas semanas.

Durante el martes, continuarán la medida de fuerza con cortes de ruta en las plantas de la empresa.