28 noviembre, 2014
Un represor condenado y dos absueltos por torturas en 1974
Este jueves el Tribunal Oral Federal N° 1 de San Martín condenó a tres años de prisión con cumplimiento efectivo al ex jefe de Prefectura Naval de Campana Carlos Ramón Shaller. Además absolvió a otros dos imputados acusados de ser participes del secuestro y tortura en 1974 de Marta Querejeta que entonces tenía 16 años.
Este jueves el Tribunal Oral Federal N° 1 de San Martín condenó a tres años de prisión con cumplimiento efectivo al ex jefe de Prefectura Naval de Campana Carlos Ramón Shaller. Además absolvió a otros dos imputados acusados de ser participes del secuestro y tortura en 1974 de Marta Querejeta que entonces tenía 16 años.
Marta Querejeta, militante del Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT) tenía 16 años y un embarazo de dos meses cuando el 5 de diciembre de 1974 llegó a su casa de Campana un Ford Falcon. En el auto se encontraban, entre otros, el ex oficial auxiliar de la la Prefectura de Campana, Oscar Rubén Montagano. Querejeta fue obligada a subir al vehículo y trasladada al edificio de la Prefectura Naval de Campana.
Ahí fue interrogada por el jefe de la dependencia, Carlos José Ramón Shaller, sobre su militancia. Ante la falta de respuesta de parte de la detenida, fue trasladada por un hombre de apellido Benítez a una casa particular donde la sometieron a sesiones de tortura hasta que informó que estaba embarazada. Entonces fue devuelta a la Prefectura de Campana.
Mientras estuvo detenida Montagano fue el responsable de custodiarla. Una vez liberada, Querejeta salió con su cuerpo malherido por golpes y picana. El médico de la Policía Bonaerense, Carlos Quetglas libró un certificado de salud sin revisarla y con la intención de ocultar lo que Marta tuvo que vivir durante su cautiverio.
Montagano y Quetglas son los dos imputados que resultaron absueltos en esta causa. El primero estaba acusado de «privación ilegal de la libertad cometida por abuso funcional, agravada por el empleo de violencia y amenazas, e imposición de tormentos agravados por ser la víctima un perseguido político». Mientras que el médico policial era imputado por «encubrimiento, en concurso ideal con incumplimiento de los deberes de funcionario público y de imposición de tormentos agravados».
Shaller, el único condenado, fue acusado de los delitos de dos allanamientos ilegales, privación ilegal de la libertad agravado y torturas agravadas por tratarse la víctima de una perseguida política. Por este motivo el fiscal Marcelo García Berro había pedido una condena de 14 años para él, diez para Montagano y dos para Quetglas.
Desde la querella, el abogado Pablo Llonto entendió que tanto Shaller como Montagano deberían ser condenados a la pena de 20 años, mientras que para el médico Quetglas pidió 14.
El tribunal compuesto por los jueces Héctor Sagretti, Marta Milloc y Diego Barroetaveña decidió penas más bajas y dará los fundamentos de la sentencia el 12 de diciembre próximo a las 18 horas.
Si llegaste hasta acá es porque te interesa la información rigurosa, porque valorás tener otra mirada más allá del bombardeo cotidiano de la gran mayoría de los medios. NOTAS Periodismo Popular cuenta con vos para renovarse cada día. Defendé la otra mirada.