El vicerrector que fue funcionario de la SIDE

Este miércoles la Federación Universitaria de Buenos Aires (FUBA) se movilizó al rectorado de su casa de estudios para rechazar la designación de Darío Richarte como vicerrector por haber sido funcionario de la SIDE durante el gobierno de Fernando De la Rua.

Tras la elección de Alberto Barbieri como rector de la Universidad de Buenos Aires (UBA) a fines de 2013, los funcionarios a cargo de la universidad fueron renovados. En ese marco, el actual rector designó a Darío Richarte como su vice.

Richarte cuenta con el antecedente de haber sido el número dos de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) durante el gobierno de Fernando De la Rua (1999 – 2001) y particularmente durante la represión del 19 y 20 de diciembre de 2001 que dejó un saldo de decenas de muertos.

En este contexto la FUBA ha lanzado una campaña en toda la UBA para exigir la destitución del funcionario que, además, es actualmente abogado del vicepresidente de la nación, Amado Boudou.

En diálogo con Radio Sur FM 88.3, Martha Linares, presidenta de la FUBA comentó como vienen llevando adelante la campaña y cuáles son los reclamos.

“La Federación Universitaria viene haciendo una campaña en varias facultades donde lo que hicimos fue buscar el aval de todos los estudiantes. También trabajamos con organismos de derechos humanos que acompañan este reclamo”, explicó Linares quién calificó la designación de Richarte como “una provocación”.

La dirigente estudiantil recordó que en 2006, algunos sectores políticos de la universidad intentaron que Atilio Alterini (ex funcionario de la dictadura) fuera designado rector de la universidad “y eso se evitó porque el movimiento estudiantil se opuso muy fuertemente”.

Ese repaso histórico fue hecho por la presidenta de la FUBA con el objetivo de destacar que “hoy llegamos al 2014 con un vicerrector que trabajó en los servicios de inteligencia y para nosotros esa es la muestra evidente de que se gobierna con una falta de democracia absoluta. Porque ¿quién votaría a Richarte como vicerrector? Jamás recibiría el apoyo del movimiento estudiantil ni del movimiento docente”.

Linares hizo énfasis en que el reclamo de fondo tiene que ver con la falta de democracia en la universidad: “Recordemos que en la UBA la mayoría de los docentes no tiene ciudadanía, no puede votar. Nosotros reclamamos, además de la destitución de Richarte, que necesitamos urgente un proceso de democratización de la universidad”, dijo.

Consultada sobre cuál fue la respuesta de los estudiantes ante la campaña impulsada por la FUBA sostuvo que “es de repudio. Tuvimos muy buena recepción dentro de las facultades y entendemos que tenemos un aval para exigir lo que estamos exigiendo”. “Hay un sentimiento que tiene que ver con esto porque esta falta de democracia a nivel general en el rectorado luego se reproduce en las facultades. Entonces lo que exigimos es rediscutir el cogobierno universitario”, agregó.

Según Linares, la importancia de reformar el cogobierno universitario radica en que “ahí se define la orientación social de la universidad. Se discuten los planes de estudios, se discute si los profesionales van a ser formados para trabajar en multinacionales o para trabajar en función de los intereses de los sectores mayoritarios que, al fin y al cabo, son los que sostienen la educación pública”. Y destacó que también “es donde se define la orientación de las investigaciones que realiza la UBA. Todas las líneas que tienen que ver con la extensión universitaria, es decir qué relación va a tener con las sociedad la universidad”.

Finalmente comentó que “la Federación es parte del cogobierno porque ganamos la mayoría estudiantil. Entonces es importante decir que en lo que son los órganos institucionales también hemos llevado el reclamo pero son palabras que caen en un saco vacío”. En ese sentido resaltó que las declaraciones del rector Barbieri de los últimos días apuntaron a insinuar que la UBA “es una de las universidades más democráticas del mundo. Se está queriendo llevar a un proceso donde se deje de discutir la necesidad de democratizar la universidad”.

“Todos están de acuerdo con que hay que democratizar pero cuando efectivamente se da el debate nadie avanza sobre esa decisión”, concluyó la presidenta de la FUBA.