«Cuando lo echaron a Maradona de EE.UU. hubo una huelga general en Bangladesh»

En un partido muy parejo Francia supo explotar un arma que fue clave para todos los equipos en el torneo: la pelota parada. De allí llegó el único gol que le dio la victoria de la mano del defensor Samuel Umtiti.
Este martes Bélgica juega la semifinal del Mundial de Rusia 2018 contra el seleccionado francés. Es la segunda vez en su historia que llega a esta instancia, la anterior había sido en 1986. Si bien hay diferencias y similitudes entre aquella Bélgica y la actual, es notable la influencia de la migración africana a Europa y, como no también, el colonialismo que también explica una parte de esta selección.
Francia, Bélgica, Inglaterra y Croacia se convirtieron en los cuatro mejores equipos del mundial. Supremacía europea absoluta y, por cuarta vez consecutiva, el campeón del mundo saldrá del viejo continente. Este martes jugarán Francia-Bélgica y el miércoles Inglaterra-Croacia. Los ganadores se verán el domingo 15 de julio en el estadio olímpico de Luzhniki en Moscú.
Ya están los ocho clasificados a los cuartos de final de la Copa del Mundo. Ataques verticales en salidas rápidas, dinámica de transición entre defensa-ataque y más pelota parada, parecen ser las recetas de los seleccionados que siguen en carrera.
En los días posteriores a una eliminación argentina en una Copa del Mundo se necesitan culpables. Se pide sangre, actitud y se reivindica la figura de los que sí lograron un mundial. Lo cierto es que la selección nacional lleva 17 torneos disputados sin conseguir un título (Copa América 1993), lo que representa la mayor sequía de su historia.
Hace poco más de dos semanas Rusia y Arabia Saudita abrían la Copa del Mundo y es innegable que la fase de grupos se pasó volando. Un mes dura el Mundial (la final será el 15 de julio) y ya se consumió la primera mitad. Este sábado arrancan los duelos mano a mano que, afortunadamente, tendrán a Argentina en la disputa.