Campaña internacional por la libertad de Julian Assange

Bajo las consignas #FreeAssangeNOW y #AssangeArgentina las redes sociales se inundaron de posteos este 22 de noviembre para exigir la libertad de Julian Assange. El periodista australiano se encuentra bajo arresto en el Reino Unido desde 2019 cuando Ecuador le retiró el asilo político que le permitía permanecer en la embajada de ese país sudamericano en Londres.

Assange, como cabeza visible del portal Wikileaks, hizo públicos varios documentos clasificados estadounidenses que revelaron los crímenes de lesa humanidad cometidos en distintas partes del mundo. Tanto por tropas de EE.UU. como de otros países. Por este motivo -y a pesar de no ser ciudadano estadounidense- la justicia del país norteamericano ha exigido su extradición para juzgarlo por, supuestamente, violar su ley de espionaje.

“Creemos que es un momento clave, de clivaje, donde su caso puede ir para un lado o para el otro”, sostuvo  María Clara Albisu, integrante de la Comisión Directiva del Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA) y una de las impulsoras de la campaña en Argentina. En ese sentido explicó que “sucedieron dos cosas estos últimos meses que intensificaron la presión contra Assange y llevaron a que se redoblen los esfuerzos de solidaridad: por un lado una investigación de Yahoo News reveló hace poco que EE.UU. tenía un plan para asesinar a Assange y esto no fue desmentido por Mike Pompeo, ex secretario de Estado de Donald Trump y presunto ideólogo”. 

A esto se suma que el fallo que había suspendido su extradición, fue apelado por EE.UU. “Existía algo parecido a una medida cautelar que hacía que él siguiera preso pero en Gran Bretaña y ahora EE.UU. apeló y la Corte en Londres está considerando esa apelación, eso es muy peligroso”, detalló Albisu.

Pero existe un tercer factor que llevó a que las acciones de visibilidad se dieran en esta fecha. El próximo 28 de noviembre se cumplen 11 años de lo que se conoció como Cablegate que fue la publicación de Wikileaks de más de 250 mil documentos secretos del Departamento de Estado. Aunque hay que recordar que “eso no lo hizo solo Assange, se hizo a través de cinco grandes medios: The Guardian, New York Times, Le Monde, El País y Der Spiegel”, agregó la trabajadora de prensa.

En Argentina las acciones de solidaridad fueron impulsadas por distintos sindicatos, organismos de derechos humanos y también organizaciones políticas. Sin embargo, es particularmente sentido por las y los periodistas. Es por eso que al frente se pusieron el SiPreBA junto a la Federación Argentina de Trabajadores de Prensa (Fatpren) y en coordinación con la Federación Internacional de Periodistas (FIP).

“Para nosotros como periodistas, como personas que defendemos la verdad, los derechos humanos y el derecho a la información nos preocupa; sobre todo en un contexto en que EE.UU. está gobernado por el tipo que cuando era vicepresidente de Obama dijo que Assange era un terrorista”, apuntó Albisu.

Desde el SiPreBA consideran que “la información y la comunicación son derechos humanos” por eso “la persecución a Assange es un caso testigo porque es un golpe contra el periodismo, la libertad de prensa, la libertad de expresión y fundamentalmente el derecho de los pueblos a estar informados sobre asuntos de relevancia pública que les competen”.

Para Albisu, en caso de que se lleve a cabo la extradición y el juicio en EE.UU., “se le abre las compuertas a que cualquier otro gobierno a perseguir con leyes antiterroristas a periodistas”.

Es que la persecución contra Assange es por haber hecho su trabajo: “Él está siendo acusado porque tomó lo que unas fuentes le dieron, lo verificó y lo publicó. Y eso es el procedimiento que hacemos todos los periodistas todos los días”. “Entonces si frente a la perspectiva de hacer tu trabajo te enfrentas a cargos que pueden resultar en 175 años de prisión, confinamiento solitario, poco acceso a tu familia, en detrimento de tu salud, lo pensás dos veces”, reflexionó la dirigente del SiPreBA.

“Adherimos a esta campaña porque defendemos los derechos de todos los periodistas del país que pueden ser susceptibles de ser alcanzados por este tipo de legislación y persecución”, resaltó. Y concluyó: “Cuando un gobierno intenta ir contra el derecho de un periodista a publicar esa información menoscaba la democracia”.