El Mundo

7 septiembre, 2020

“Estamos convencidos que fueron capturadas, torturadas y ejecutadas”

Así lo denunció la madre de una de las dos niñas asesinadas por el ejército de Paraguay en un operativo contra el Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) la semana pasada. A su vez, La ONU calificó de “gravísimo” el hecho y pidió por su esclarecimiento.

Miriam Villalba  aseguró en una entrevista radial que las imágenes a las que han podido acceder los familiares les hace pensar que las niñas fueron “capturadas, torturadas y ejecutadas” por el ejército paraguayo.

Ambas fueron acribilladas por la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) durante un supuesto enfrentamiento contra el Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP). Para encubrir el crimen fueron enterradas como NN y se las presentó como guerrilleras. Tenían 11 años de edad.

Miriam es abogada, madre de Lilian y tía de María del Carmen, las dos menores ejecutadas. Según el médico forense Pablo Lemir que examinó los cadáveres, las balas entraron tanto por delante como por detrás. 

En principio los disparos no parecen ser realizados a corta distancia. Sin embargo, para la familia las niñas fueron “capturadas, torturadas y ejecutadas”. 

“El médico forense de la fiscalía (Pablo Lemir), que en un principio dijo que ellas tenían 18 y 17 años, fue el que mencionó que las niñas tenían 6 disparos en la espalda”, recordó Miriam. “Incluso el médico forense afirmó que tenían 6 disparos en la espalda, marcando que las niñas estaban huyendo”, expresó.

“Fueron agarradas vivas, torturadas y ejecutadas. Luego el presidente de Paraguay se fue a preparar la escena y posó sobre los cuerpitos”, denunció. Y agregó que el gobierno paraguayo “está jugando de forma asquerosa y sucia contra nuestras familias, encubriendo la ejecución y la masacre de estas pequeñitas”.

Miriam acusó también a las autoridades de Paraguay de plantar pruebas para justificar ambos asesinatos. Sostuvo que, tras las muertes, a las niñas las vistieron con el uniforme que usan guerrilleros del EPP y luego los cadáveres fueron fotografiados. Las imágenes se guardaron en la carpeta del fiscal y las prendas como otras evidencias fueron rápidamente incineradas, “cumpliendo con el protocolo sanitario por el coronavirus Covid 19”, justificaron desde el Ministerio Público.

“Es un hecho gravísimo”

Por su parte, el representante en América del Sur de la alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Jan Jarab, se manifestó al respecto. ”Se trata de un hecho gravísimo que terminó con la vida de dos niñas a quienes el Estado debía proteger”, expresó. Paraguay “debe investigar sin demora y de forma imparcial”, añadió.

Asimismo, afirmó que su oficina ha recibido “información inquietante” sobre intentos por manipular evidencias de lo ocurrido. Y consideró “crucial que durante la investigación se tengan en cuenta las normas internacionales de derechos humanos. 

También sostuvo que la investigación debe indagar en las responsabilidades directas en el incidente. Pero también en todo el nivel jerárquico involucrado en la operación, así como en la posible alteración del lugar de los hechos.

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