Mundo Gremial

19 agosto, 2020

Como respuesta a un conflicto gremial, empresarios decidieron derramar leche en vez de donarla

Luego del paro de 24 horas organizado por el gremio de lecheros, se propuso que el excedente de los silos de almacenamiento sea entregado a los sectores vulnerados. Sin embargo, las patronales decidieron volcar la leche en un campo.

La Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (ATILRA), organizó el último martes un paro de 24 horas en pedido de mejoras salariales, por lo que se paralizó el trabajo en las usinas lácteas. Esto produjo un excedente de leche fluida en los silos de almacenamiento.

Desde el gremio se ofrecieron a «recibir y procesar esa materia prima, siempre y cuando la misma sea donada a entidades de bien público», con el fin de abastecer «a los sectores más castigados y vulnerables de nuestra sociedad, paliando, en parte, las vicisitudes nutricionales que sufre gran parte de la niñez de nuestro país».

“Dado que las medidas de fuerza incluyen a los centros de distribución, el otro punto crítico se encuentra en la logística de productos terminados que no han podido ser preparados en el día de hoy y no podrán ser abastecidos hacia los centros de consumo durante las primeras horas de mañana. Como lógica consecuencia, es de esperar entonces faltantes de leches y productos lácteos en las góndolas de varios puntos del país”, explicaron el martes desde el Centro de Industrias Lecheras (CIL).

Sin embargo, desde el sector empresario del rubro decidieron derramar esa leche en un campo, echando a perder cantidades industriales de una de las principales materias primas del país. «Prefirieron arrojar la leche antes que donársela a los hogares carenciados», remarcaron fuentes del sector en diálogo con Infogremiales, que hablaron de miles de litros de leche volcada en los suelos.

El gremio reclamaba un bono solidario de 16 mil pesos para robustecer la estructura financiera de ATILRA y un bono de 12 mil pesos para los empleados para compensar la demora en el pago de los incrementos salariales. Las cámaras no se mostraron dispuestos a pagar la compensación, mientras que el bono solidario pidieron destinarlo a la Obra Social.

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