La Matanza: la policía bonaerense mató a un adolescente de 18 años

Lucas Nahuel Verón cumpló 18 años el viernes 9 de julio, el mismo día que lo mató la policía bonaerense. Lucas viajaba en moto con un amigo por La Matanza, cuando un móvil del Comando de Patrullas los empezó a perseguir sin razón aparente. Quien manejaba el patrullero disparó entre dos y tres veces con su arma reglamentaria, matando a Lucas por la espalda. Los asesinos huyeron, dejándolo tirado en el piso. 

Lucas murió en hospital Simplemente Evita de González Catán, luego de que los médicos intentaron salvarlo por las lesiones que había sufrido.

Los efectivos Ezequiel Benítez y Cintia Duarte fueron imputados por el fiscal Juan Pablo Tahtagian por el delito de «homicidio agravado por el uso de arma de fuego». Según las fuentes policiales, ambos acusados se negaron a declarar, por lo que permanecerán detenidos. La Comisión Provincial por la Memoria aseguró en un comunicado que se trató de un caso de «gatillo fácil».

El asesinato de Lucas Verón se da en un marco de acentuación de la violencia policial en todo el país. Según la Coordinadora Contra la Represión Policial e Institucional (Correpi), desde el comienzo de la cuarentena hasta el 23 de junio se registraron al menos 12 casos de gatillo fácil, y casi 50 situaciones de violencia policial.

“No cuestionamos la decisión sanitaria respecto de la pandemia, sino la decisión de dejar el cumplimiento de las medidas en manos de las fuerzas de seguridad del Estado”, señaló María del Carmen Verdú, abogada y referente de Correpi, en diálogo con Página 12. “Hay gente detenida por haber violado el aislamiento, por tentativas de robo, pero cuando se trata de un uniformado y el delito es homicidio, está libre por la calle”, agregó.