4 marzo, 2019
El cuento de la criada, versión tucumana
Por Abril Tubio. El norte de Argentina fue nuevamente noticia por obligar a ser madre a una niña de 11 años. Al igual que sucedió en Jujuy, tras incumplir la ley de Interrupción Legal del Embarazo (ILE) – que rige en nuestro país desde 1921 – en Tucumán le practicaron una cesárea a otra nena violada. En Argentina las mujeres son vistas como lugares en los cuales fabricar bebés para después darlos en adopción a “familias importantes”.

Por Abril Tubio. El norte de Argentina fue nuevamente noticia por obligar a ser madre a una niña de 11 años. Al igual que sucedió en Jujuy, tras incumplir la ley de Interrupción Legal del Embarazo (ILE) – que rige en nuestro país desde 1921 – en Tucumán le practicaron una cesárea a otra nena violada.
Lucía, nombre ficticio que se le puso a la menor, llegó al Hospital Eva Perón de la capital tucumana con un fuerte dolor de panza el 31 de enero. Desde que detectaron su embarazo no hicieron más que dilatar el proceso y no cumplir con la ley. Se negaron a realizarle un aborto aunque, como es ya de público conocimiento, Lucía pidió que le saquen de adentro lo que le metió “ese viejo”, haciendo referencia a la pareja de su abuela, su violador. Además, sus palabras estaban acompañadas, en primera medida, por el Código Penal (1921), luego reafirmadas por la Corte Suprema de Justicia (2012) y el Protocolo sobre Interrupción Legal del Embarazo del Ministerio de Salud (2015).
A pesar de contar con todo el apoyo de la ley, ya son dos los casos que toman relevancia en los que se tortura a menores de edad. No es casualidad que ambos se hayan dado en las provincias más conservadoras y religiosas del país.
Tanto en Jujuy como en Tucumán, las menores se acercaron acompañadas de sus madres al hospital con el fin de obtener una Interrupción Legal del Embarazo. Ambas se fueron con la cicatriz de una cesárea que deberán llevar por el resto de sus vidas.
Se vuelve imposible no hacer la comparación con The Handmaid’s Tale (El Cuento de la Criada), libro que escribió Margaret Atwood -que después derivó en una exitosa serie con el mismo nombre – en el que se conoce la historia de “Defred”, una criada.
Estados Unidos sufre un Golpe de Estado y queda en manos de un Gobierno totalitario y exageradamente religioso. “La República de Gilead” en donde los hombres tienen el poder y sus mujeres la única misión de acompañarlos. Ellos de traje negro y ellas de vestido verde oscuro.
Lo que más preocupa a todos en Gilead es aumentar el nacimiento de bebés, por lo tanto, lo más codiciado son las mujeres fértiles. Se podría decir que las esposas del grupo gobernante buscan “criadas” y las utilizan como incubadoras. Sus maridos las violan y terminan dando a luz a su bebé. Una vez logrado el objetivo, las llevan a otras familias – porque no pueden tener contacto con los recién nacidos – y así sucesivamente.
Lo que más llama la atención de la semejanza entre Gilead y el norte argentino es que Atwood, al momento de escribir su libro, confesó haberse inspirado en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) durante la última dictadura cívico-militar-eclesiástica. “Una de mis fuentes para The Handmaid’s Tale fue la Argentina bajo el gobierno de los generales. Tantas mujeres asesinadas y sus hijos robados”, escribió la canadiense en Twitter en enero del año pasado.
Lo cierto es que en Argentina las mujeres – sin importar su edad – son vistas como objetos, como lugares en los cuales fabricar bebés para después darlos en adopción a “familias importantes”, como se intentó hacer en Jujuy -según expresó el gobernador Gerardo Morales, y que después se reveló que esa familia era la del fiscal Carlos Stornelli- y como lo hacen en Gilead.
En el primer caso la recién nacida falleció. En el segundo, la médica que realizó la cesárea explicó que se le daba “una asistencia respiratoria mínima con oxígeno y se esperaba su muerte espontánea”. Es decir, no se salvó ninguna vida y se arruinaron dos. Atwood, en Argentina hay material para inspirar – también – la tercera temporada.
@AbrilTubio
Si llegaste hasta acá es porque te interesa la información rigurosa, porque valorás tener otra mirada más allá del bombardeo cotidiano de la gran mayoría de los medios. NOTAS Periodismo Popular cuenta con vos para renovarse cada día. Defendé la otra mirada.