«No hay para la derecha ni para la izquierda un candidato como Lula»

La periodista y editora del periódico Brasil de Fato, Vivian Neves Fernándes, dialogó con «Llevalo Puesto» por FM La Tribu sobre la situación que se vive actualmente en su país ante la persecución judicial a Lula da Silva y su posible proscripción como candidato para las elecciones presidenciales.

– ¿Crees que las manifestaciones actuales en favor de Lula tendrán un efecto positivo?

– Creo que las movilizaciones que están ocurriendo este viernes son mas potentes que las del jueves. Pero no alcanzan para hacer que Lula no vaya preso. El poder Judicial en Brasil es muy cerrado, muy elitista y no teme ser presionado por las movilizaciones en las calles. Pero hay algo que es importante destacar que es que dentro del Supremo Tribunal Federal hay una acción constitucional que pide que todos los condenados de segunda instancia tengan derecho de recurrir a instancias superiores antes de ser apresados. Eso se va a discutir durante la próxima semana. Esto creo que si puede impactar en la prisión de Lula.

– ¿Cuán sorpresiva fue la reacción de las Fuerzas Armadas ante la posibilidad de que Lula no fuera preso?

– Las fuerzas militares siempre estuvieron presentes en la discusión. Desde el golpe de Dilma hay gente que sale a la calle a pedir la intervención militar. Hay fotos de protestas de la derecha donde se ven carteles pidiendo que vuelvan los militares y que venga EE.UU. a ayudarnos porque este país está hecho un lío.

Sin embargo la declaración de General Eduardo Villas Bôas en la víspera del juicio de la Suprema Corte fue en alguna medida mal interpretada, aunque fue una declaración infeliz. Villas Bôas no pertenece al sector más reaccionario y conservador del Ejército. Creo que hizo esta declaración por presión interna para mostrar al sector de extrema derecha que él está en el comando y quiere que la constitucionalidad y las instituciones de la democracia prevalezcan. Pero a los medios hegemónicos, no solo los de Brasil, les llegó la versión de que ese General estaba presionando a la Suprema Corte con una supuesta intervención militar en caso de que Lula reciba el habeas corpus.

No se si alguna facción de las fuerzas armadas piensan en un golpe, pero sí hay un discurso conservador no solo en el ejército sino también en la política con el precandidato a presidente Jair Bolsonaro, quien sí pide y defiende la participación de los militares en la política.

– ¿Quipeb es Bolsonaro?

– Jair Bolsonaro es candidato a presidente por un partido de derecha y defiende públicamente no solo la participación de los militares sino que está en contra del aborto, del matrimonio homosexual, en contra del PT, de la izquierda. Además defiende la violencia y tiene una intención de voto muy alta en las encuestas. Es el segundo o tercero según la encuestadora, el primero siempre es Lula. Algunos lo comparan con Donald Trump. Es el personaje más peligroso de la derecha porque tiene la posibilidad de llegar a la presidencia.

– ¿La gente va a poder votar a Lula si va preso? ¿Qué va a hacer el PT?

– Es una pregunta complicada porque el PT siempre dice que Lula es su único candidato. Como la presión y el conflicto siguen creciendo no se como se va a posicionar ni a quien va a apoyar Lula. Porque si él dice que apoya a un candidato mucha gente de Brasil va a seguir su consejo y lo va a votar, pero hoy creo que no hay para la derecha ni para la izquierda un candidato favorito para octubre como Lula. Lo que pueda pasar es un interrogante muy fuerte.

– ¿Quienes son los empresarios que están detrás de esta avanzada contra Lula?

– El principal representante es la Federación de Industrias del Estado de Sao Paulo cuyo presidente es Paulo Antonio Skaf​. Este es el eje más importante de manejo de la política por parte del sector industrial y empresarial de acá. Incluso en el golpe a Dilma movilizaron junto a sectores de derecha como el movimiento “Vení para la calle” o el “Brasil libre” que invitaban a la gente a protestar contra Dilma y ahora intentan hacer lo mismo pero contra Lula.

Es raro porque los gobiernos del PT tuvieron buen diálogo con este sector, pero después del conflicto más fuerte abandonó el proyecto neodesarrollista que era el de Lula y salió a la calle. De todas formas no tiene un candidato definido para las elecciones, entonces esto hace que no sepamos bien cuales serán sus próximos pasos. Es un sector importante que en una economía en crisis como la de Brasil tiene fuerza, pero tampoco tanta.