13 noviembre, 2017
Reforma de Salud Mental: «El área está co-gobernada por la corporación médica»
El último viernes se dio a conocer un proyecto del gobierno nacional para modificar la reglamentación de la Ley Nacional de Salud Mental 26.657 sancionada en 2010. Distintos profesionales y usuarios cuestionaron la medida por reinstaurar una «perspectiva biologicista».

El último viernes se dio a conocer un proyecto del gobierno nacional para modificar la reglamentación de la Ley Nacional de Salud Mental 26.657 sancionada en 2010. Distintos profesionales y usuarios cuestionaron la medida por reinstaurar una «perspectiva biologicista».
La iniciativa fue impulsada por la Dirección Nacional de Salud Mental a cargo del polémico Andy Blake, que cuenta con un fuerte vínculo con el sector privado ya que en su currículum figura el haber trabajado para las dos prepagas más importantes del país: OSDE y Swiss Medical.
Además, el funcionario ocupó el mismo cargo en la Ciudad de Buenos Aires cuando Mauricio Macri era jefe de gobierno. Bajo su gestión se llevó a cabo la recordada represión en el Hospital Borda con el objetivo de usar esos terrenos para el desarrollo inmobiliario.
Retroceso en la concepción de la salud mental
El decreto que aún espera la firma del presidente, supone -según explicó el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS)- un retroceso respecto a la perspectiva actual de la ley que ve a la salud mental como un “proceso multideterminado por componentes históricos, socio económicos, culturales, biológicos y psicológicos”.
En su lugar “reinstala el modelo médico hegemónico de perspectiva biologicista que resultó insuficiente para un tratamiento integral de los padecimientos mentales”.
Esta concepción atenta contra la mirada multidisciplinaria y los aportes que se pueden hacer desde «la terapia ocupacional, la musicoterapia, el arte, la enfermería, la psicología, los acompañamientos terapéuticos y el trabajo social”.
Asimismo, en sentido totalmente opuesto a la legislación vigente, el decreto plantea una vuelta al modelo de manicomios, llamados eufemísticamente “hospitales especializados en psiquiatría y salud mental”, ponieno al usuario en el rol de persona «enferma» y habilitando la “internación o tratamiento que motive el aislamiento de las personas con trastornos mentales y/o del comportamiento».
Una reforma sin consenso
Ángel Barraco, asesor permanente de la Comisión de Salud de la Legislatura y miembro del Consejo Consultivo de la ley dialogó al respecto con el programa «Llevalo Puesto» de FM La Tribu 88.7 y denunció el carácter inconsulto de esta propuesta.
Desde su perspectiva «hay un sustento ideológico que es evitar todo tipo de participación». En ese sentido subrayó que el Consejo Consultivo Honorario de la Ley Nacional «que es una instancia creada por la misma norma» no fue convocado en estos dos años. «Se trata de un órgano que si bien es no vinculante fue creado para asesorar», explicó.
«Tuvimos que presionar nosotros para tener en total tres reuniones en las que nunca nos informaron de esto lo cual desnaturaliza la ley que además fue sancionada por unanimidad, con la participación de todos los sectores», añadió. Es decir que el gobierno «está contra un proceso que ellos mismos votaron cuando eran oposición».
Barraco analizó que «la responsabilidad» de esta propuesta que va «contra la ley», no es sólo «del gobierno macrista». «El área de Salud está co-gobernada por la corporación médica», sentenció. Y recordó los casos del doctor Jorge Lemus «que fue secretario de Salud de la Ciudad y después fue nombrado por Macri en Nación». «Lo mismo el director nacional de Salud Mental, el doctor Andy Blake estaba en la capital y pasó a Nación. Hay una recurrencia en este modelo», concluyó.
Foto: La Tinta
Si llegaste hasta acá es porque te interesa la información rigurosa, porque valorás tener otra mirada más allá del bombardeo cotidiano de la gran mayoría de los medios. NOTAS Periodismo Popular cuenta con vos para renovarse cada día. Defendé la otra mirada.