1 enero, 2017
Sobreseimiento para un ex juez de Menores acusado de sustracción de identidad
Se trata de Juan Carlos Marchetti, implicado en la sustracción de la identidad de Manuel Gonçalves Granada, hijo de Ana María Granada y Gastón Gonçalves, ambos asesinados por el terrorismo de Estado. También fueron sobreseídos un asesor de Menores y dos funcionarios judiciales.
En el año 2004 Manuel Gonçalves impulsó dos procesos penales. Uno por la masacre en la que había sido asesinada su mamá y otro por su propia sustracción de identidad. En este último los actores principales eran el ex juez Marchetti, el ex asesor de Menores Juan Carlos Magni y dos funcionarios del juzgado de Lomas de Zamora: Juan Delfín Castro y Francisco García Cortina.
La Asociación Abuelas de Plaza de Mayó emitió un comunicado donde afirma que el fallo de Casación significa “un retroceso en el juzgamiento de la complicidad judicial en los delitos de la última dictadura y un paso atrás en la búsqueda de Memoria, Verdad y Justicia”.
Manuel tenía cinco meses el 19 de noviembre de 1976. Ese día fuerzas de la Policía Bonaerense, de la Federal y del Ejército atacaron una casa de la calle Juan B. Justo en la localidad de San Nicolás. Acribillaron a su mamá Ana María y al matrimonio Omar Alfredo Amestoy y Ana Matra Fettelini. También asfixiaron con gases a Fernando Amestoy de tres años y a María Eugenia, de cinco. La mamá de Manuel lo cubrió con colchones, dentro de un placar, y así lo salvó.
En un comunicado de Abuelas de Plaza de Mayo se explica que “el argumento central del fallo de Casación es que Ana María Granada alteró la identidad de su hijo. Sostiene que Marchetti se preocupó por la salud y el bienestar del niño, que ignoraba que no era de apellido «Valdez», y que las averiguaciones que se le reclama no haber hecho no le eran exigibles por su competencia como juez de Menores”.
El camarista Eduardo Riggi fue aún más lejos en su fundamentación. Desde Abuelas indican que “Riggi, en su voto, afirma que a Marchetti no le es atribuible ‘el delito previo que había cometido la madre del niño al alterarle su identidad’. Y agrega: ‘En este marco, con la alteración de la identidad del niño ya producida, ninguna posibilidad razonable tuvo Marchetti de conocer oportuna y debidamente la real filiación del menor y, por añadidura, de orientar lo actuado a ubicar a sus verdaderos parientes. Y sin duda también resultó víctima de aquella circunstancia’”.
Sin embargo, explica el comunicado, Marchetti tenía conocimiento de la búsqueda de Abuelas desde 1978. Varios representantes de la organización visitaron el juzgado y mandaron cartas contando lo que pasaba con los niños. El entonces juez también sabía que Manuel había sido llevado a su juzgado después del operativo donde asesinaron a su madre, lo que le hubiera permitido relacionar ambas situaciones. Y no lo hizo.
El bebé de cinco meses quedó bajo custodia policial durante cuatro meses en una sala del hospital San Felipe. “Sin buscar a sus padres -dice el comunicado- Marchetti lo dio en adopción a una familia de otra localidad de la provincia de Buenos Aires. Manuel Creció como Claudio Novoa hasta los 19 años, cuando recuperó su identidad”.
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