14 septiembre, 2016
“El diablo adentro de la cárcel tiene nombre y apellido: Servicio Penitenciario Federal”
El lunes pasado el Servicio Penitenciario Federal realizó una requisa en el Centro Universitario de la cárcel de Devoto. Aunque la noticia llegó a los medios masivos como un “escándalo” por las cosas que supuestamente encontraron allí, quienes estudian, coordinan y realizan actividades allí afirman que se trató de una acción “ilegal” y “violenta”.

El lunes pasado el Servicio Penitenciario Federal (SPF) realizó una requisa en el Centro Universitario de la cárcel de Devoto (CUD). Aunque la noticia llegó a los medios masivos como un “escándalo” por las cosas que supuestamente encontraron allí, quienes estudian, coordinan y realizan actividades en el CUD afirman que se trató de una acción “ilegal” y “violenta”.
Un detenido de la unidad de Devoto, estudiante del Centro Universitario que depende de la Universidad de Buenos Aires, relató los hechos a Notas: “El lunes, el SPF irrumpió en el CUD, nuestra casa de estudios, fuera del horario en el que nosotros estamos realizando nuestras actividades académicas y culturales”. Los estudiantes llevan su vida académica de lunes a viernes de 9 a 18. “El SPF entró después de las 18, con un allanamiento violento”, contó.
“Entraron en todas las coordinaciones de las distintas facultades: Sociología, Psicología, Económicas, Derecho, Filosofía y Letras, el sindicato que nuclea a los trabajadores en contextos de encierro, la biblioteca y otros lugares”, detalló.
El estudiante declaró: “Queremos que lo sepan porque es un hecho completamente arbitrario por parte del SPF y nos preocupa”. También comentó que este martes realizaron una asamblea general de estudiantes y coordinadores del centro de estudios, allí, “un compañero contó que ayer mismo [por el lunes] la policía -personal de requisa- lo agarró en el módulo 5 y le pegó una golpiza y lo amenazó diciéndole que no se meta en ningún tipo de quilombo porque lo iban a trasladar”.
“Estamos indignados y queremos hacerles saber que la mano dura llegó a todos lados”, concluyó.
Julieta Sosa es abogada y militante de La Mella en Cárceles, agrupación que hace casi una década articula con el CUD y realiza actividades culturales y formativas en el penal. Al ser consultada sobre el contexto en el que se dio la requisa, sostuvo: “El Servicio Penitenciario Federal está avanzando con toda. En Devoto, pero también en el Congreso con una reforma del SPF del macrismo”.
Además, sumó que lo ocurrido en el CUD “fue ilegal”, ya que se da “en un ámbito de la UBA, que mantiene autonomía sobre el resto del penal”. Y remarcó: “Está prohibido que el SPF entre en un espacio de la UBA”. Además, para sumar a las irregularidades, aseguró que no hubo testigos de la requisa, salvo los propios miembros del SPF.
Por su parte Marcelo Langieri, coordinador del programa UBA XXII (Educación en Cárceles) de la Carrera de Sociología, también se refirió a lo ocurrido el lunes. Aunque aclaró que no tenía muchos detalles al momento de conversar con Notas, sostuvo que se trataba de un episodio “confuso” y que era incomprobable lo que difundieron los medios que se halló en la requisa.
“En el programa de Universidad en las Cárceles hay avances y fracasos. Los fracasos también son parte de la institución”, aseguró Langieri y se preguntó: “¿Cómo lográs que se realice un objetivo muy complejo e importante? ¿Creés que la cultura de la cárcel no va a tener ninguna influencia sobre eso?”. Para el docente debe haber “una respuesta, un ida y vuelta, construir otro tipo de relación”. “Eso es una batalla, un trabajo, un proceso, no es de la noche a la mañana”, agregó.
“Por otro lado, el diablo mete la mano. El diablo adentro de la cárcel tiene nombre y apellido, se llama Servicio Penitenciario Federal”, afirmó y aseguró que siempre que hay “algún quilombo” y “aparecen cosas”. “Que haya facas es muy extraño”, sostuvo Langieri.
“Pretender homologar las prácticas sociales del CUD a un pabellón cualquiera es una mirada que desconoce todo el proceso que existe ahí adentro”, analizó.
De acuerdo al sociólogo, ante fracasos o tropiezos, se debe actuar “colectivamente y que sirva para reflexionar si se cometieron errores”. “Hay que trabajar fuertemente sobre la autodisciplina”, aseguró también.
“El CUD tiene una cultura, un código distinto al resto de Devoto. De alguna manera se ponen entre paréntesis las ‘reglas de la cárcel’. Eso hay que fortalecerlo”, concluyó.
Producción: Federico Araya – @fedearayac
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