7 julio, 2016
Escuelas porteñas denuncian vaciamiento de programas y persecución política
Este miércoles, cientos de docentes y estudiantes de escuelas secundarias públicas de la ciudad de Buenos Aires se concentraron frente al edificio del Ministerio de Educación porteño, para denunciar el recorte de recursos a las escuelas públicas.

Este miércoles 6 de julio al mediodía, cientos de docentes y estudiantes de escuelas secundarias públicas de la ciudad de Buenos Aires se concentraron frente al edificio del Ministerio de Educación porteño, para denunciar el recorte de recursos a las escuelas públicas.
Los reclamos de la comunidad educativa son compartidos especialmente por escuelas situadas en barrios del sur de la ciudad: Barracas (Villa 21-24), Pompeya, Soldati, Lugano. Estas escuelas han venido sufriendo diferentes problemáticas durante los últimos años, como los problemas edilicios (desde paredes inflamables sin matafuegos hasta falta de salidas de emergencia), falta de vacantes, falta de personal en la Planta Orgánica Funcional (POF) o cierre de cursos.
Notas estuvo presente en la manifestación y conversó con Paula Leoz, delegada de la Escuela Media N. 4 D.E. 19: «Además de la cuestión edilicia que está hace años en estado de emergencia, ahora están eliminando las horas de PPC (Proyectos Pedagógicos Complementarios) que en nuestras escuelas son fundamentales para poder mantener a los chicos y chicas dentro de las escuelas», reclamó. Y agregó: «Son 120 horas semanales por escuela en 10 escuelas del sur de la ciudad, que reciben a diario a aproximadamente 500 estudiantes cada una».
Los PPC benefician a 5 mil estudiantes con diferentes proyectos y actividades que se llevan a cabo en las escuelas periféricas y más vulneradas de la ciudad. Consisten en mejoras pedagógicas y sociales de las más diversas: talleres extracurriculares (radio, comunicación gráfica, percusión, video), parejas pedagógicas en Lengua y Matemáticas, clases de apoyo, e incluso a veces han permitido que las instituciones contasen con un psicólogo o psicopedagogo en los casos en donde la POF no los prevé.
Este tipo de proyectos resultan fundamentales a la hora de disminuir la deserción escolar y la repitencia, dos problemas que están muy presentes en el discurso de los funcionarios de la educación: «Lo que ahora tenemos miedo es que nuestros compañeros que venían a los talleres ahora dejen de venir a la escuela. Si no vienen a la escuela en esas horas de la tarde, van a estar por la calle en lugar de en los talleres», decía uno de los estudiantes de la E.E.M N. 6 d.e. 5, que subió al escenario a contar la situación de su escuela, situada en la Villa 21-24 de Barracas.
La eliminación de las horas PPC fue anunciada en marzo de este año, bajo el argumento de que dichos proyectos corresponden a una “normativa vieja” que no puede convivir con la Nueva Escuela Secundaria de Calidad (NESC) que se está implementando desde el año 2014. Luego de movilizaciones y reuniones con distintos funcionarios y funcionarias, se logró que dichos proyectos fueran extendidos hasta julio de este año. Pero al inicio del segundo semestre, los cargos y los proyectos “caen”, según explican las autoridades.
Otros reclamos
Otras de las banderas levantadas por la comunidad educativa fueron: el reclamo por el recorte al programa Campamentos Escolares, el respeto a los títulos y sus incumbencias ante la aplicación de la normativa de la NESC que provoca que algunos docentes queden “en disponibilidad” debido a la eliminación de sus materias, la POF completa en todas las escuelas (ya se mencionó, faltan cargos fundamentales como el de psicopedagogo o bibliotecario), infraestructura y condiciones edilicias de higiene y seguridad adecuadas para establecimientos que acogen a menores de edad.
Por último, los y las docentes concentrados en la puerta del edificio de Esmeralda 55 pidieron la suspensión del proyecto de apoyo educativo Refuerzo, Estímulo y Motivación para el Alumnado (REMA), un proyecto que prevé que personal externo a las escuelas cumpla alguna de las funciones que venían cumpliendo los docentes de las escuelas.
Al mismo tiempo, otro grupo de docentes y organizaciones de la educación se concentraron en las puertas del edificio del Ministerio sito en Paseo Colón 255, denunciando persecución política a docentes de primera infancia. El conflicto nació en 2013 cuando la actual ministra, Soledad Acuña, estaba a cargo del Área Socioeducativa y, a partir de irregularidades en un concurso, algunos docentes se manifestaron en el Ministerio de Educación porteño.
Si bien la medida irregular fue revertida a raíz de la lucha de esos docentes, los mismos fueron sumariados. Según indica el comunicado de la Corriente Sindical 1 de Mayo, los sumarios de los cinco docentes “como lo afirma la denuncia que los origina, están basados en su condición de militantes». Con el avance de este sumario, Soledad Acuña y Rodriguez Larreta pretenden «amedrentar a toda la docencia de la ciudad, dejando en claro que cuando haya alguien que luche por las condiciones laborales»o por la apertura de espacios para los estudiantes de los barrios, «será perseguido”.
Leticia Garziglia – @letigarziglia
Si llegaste hasta acá es porque te interesa la información rigurosa, porque valorás tener otra mirada más allá del bombardeo cotidiano de la gran mayoría de los medios. NOTAS Periodismo Popular cuenta con vos para renovarse cada día. Defendé la otra mirada.