15 enero, 2016
Idi Amin Dada, campeón de boxeo y Conquistador del Imperio Británico
Si hay un dictador recordado por su gobierno sanguinario y actitudes excéntricas es del Idi Amin Dada que gobernó Uganda con mano de hierro entre 1971 y 1979. Durante su mandato sostuvo: “Me considero a mi mismo la figura más poderosa del mundo”.

Si hay un dictador recordado por su gobierno sanguinario y actitudes excéntricas es del Idi Amin Dada que gobernó Uganda con mano de hierro entre 1971 y 1979. Durante su mandato sostuvo: “Me considero a mi mismo la figura más poderosa del mundo”.
Joven soldado y boxeador
Los orígenes de Idi Amin no están claros. Se cree que nació en 1925 aunque al momento de su muerte, en 2003, los médicos de Arabia Saudita aseguraron que tenía 80 años. Su padre, un católico convertido al Islam, lo abandonó de joven por lo que se crió con la familia de su madre en un pueblo rural.
En 1946 se unió a los Fusileros Africanos del Rey (el ejército colonial británico) donde fue escalando posiciones hasta llegar a suboficial, el rango más alto que podía alcanzar un negro. No obstante, un año antes de la independencia de su país fue ascendido a teniente, convirtiéndose en uno de los dos primeros ugandeses que consiguieron llegar a oficial. Con la independencia (1962) siguió ascendiendo hasta ser jefe del Ejército en 1965.
Es importante destacar que, a pesar de haber estado viajando y ser parte de las fuerzas armadas, entre 1951 y 1960 nadie logró quitarle el título de campeón de boxeo en peso semipesado de Uganda. Sus 1,93 metros de altura fueron un importante respaldo para ese logro.
En 1965 quedó implicado con el presidente ugandés Milton Obote en un caso de contrabando de marfil y oro. Ante un pedido de investigación de la causa Obote depuso al rey Mutesa II y se proclamó presidente ejecutivo. Amin encabezó el asalto al palacio real y obligó al kabaka (rey) a exiliarse en Gran Bretaña.
A fines de la década se produjo una ruptura entre Amin y Obote, luego de un intento de atentado contra el jefe de Estado en 1969. Amin fue rebajado entonces de jefe de todas las Fuerzas Armadas a jefe del Ejército. Obote no sabía que había firmado su salida del gobierno.
Golpe de Estado: los cadáveres tapan la represa
Ante los rumores de un inminente arresto en su contra Idi Amin dio un golpe de Estado en enero de 1971 cuando Obote estaba fuera del país. Al asumir el gobierno sostuvo que era de carácter provisional y que convocaría a elecciones.
Sin embargo una semana después estableció un régimen dictatorial donde, entre otras medidas disolvió la antigua agencia de inteligencia y la remplazó por la Oficina de Investigación de Estado (SRB), cuyo cuartel general en el suburbio Nakasero de la capital se convirtió en lugar de torturas y ejecuciones masivas.
Así se abrió un reino del terror de tal magnitud que aun hoy se desconoce la cantidad de muertos y desaparecidos. La Comisión Internacional de Juristas calculó que la cifra probablemente alcanzara las 300 mil personas. Por otra parte una estimación elaborada Amnistía Internacional llevó el número a 500 mil.
Entre sus víctimas destacan Benedicto Kiwanuka, antiguo primer ministro y dos de los ministros de su propio gabinete, Wilson Oryema y Charles Oboth Ofumbi.
«Incluso Amin no sabe cuántas personas ha ordenado ejecutar. El país está lleno de cuerpos», dijo Henry Kyemba, ex ministro de Salud, que desertó y se exilió en Gran Bretaña en 1977. “Nadie puede correr más rápido que una bala”, sostuvo Amin.
La cantidad de cadáveres que poblaron el país impedía enterrarlos a todos por lo que muchos fueron arrojados al Nilo donde alimentaban a los cocodrilos. Sin embargo, en determinados momentos los restos llegaron a taponar la circulación de agua en planta hidroeléctrica de Jinja.

Un país libre de asiáticos
En 1972 Amin declaró la “guerra económica”, que implicó un conjunto de políticas que incluían la expropiación de propiedades pertenecientes a asiáticos y europeos. Aunque la leyenda cuenta que esta decisión se debió a que una mujer oriental lo rechazó, la razón menos idealista tiene que ver con que los miembros de esa comunidad controlaban gran parte de la producción y el comercio del país.
Fueron expulsados 80 mil asiáticos, la mayoría con ascendencia india ya que muchos de sus antepasados se habían asentado allí cuando era una colonia británica. Solo fueron exceptuados del decreto de expulsión médicos, abogados y maestros.
El “Conquistador del Imperio Británico”
A pesar de su política criminal y su desprecio por los ciudadanos británicos (en la oleada de expulsión de asiáticos también nacionalizó empresas británicas) recién en 1977, cuando expulsó a sus diplomáticos, el Reino Unido rompió relaciones con su ex colonia.
Fue entonces que Idi Amin se proclamó Conquistador del Imperio Británico. De hecho su título oficial era “Su Excelencia el presidente vitalicio, mariscal de campo Alhaji Dr. Idi Amin Dada, VC, DSO, MC, señor de todas las bestias de la tierra y peces del mar y conquistador del imperio británico en África en general y en Uganda en particular”. El “Dr” delante de su nombre se debe a que también se confirió un doctorado en leyes de la Universidad Makerere. Además se proclamó pretendiente al trono de Escocia.
Durante su gobierno prohibió a los hippies y el uso de minifaldas. En 1975 se presentó en un funeral real de Arabia Saudita vistiendo falda escocesa.
La crisis con Tanzania y el fin
Durante todo su gobierno Amin tuvo malas relaciones con los países vecinos, centralmente Kenia (con quien estuvo al borde de desatar una guerra) y Tanzania (contra quien finalmente lo hizo). Llegó a desafiar al ex presidente tanzano, Julius Nyerere, a un combate de boxeo.
Pero no solo con los vecinos africanos tuvo problemas. Idi Amin rompió relaciones con Israel, anterior aliado de Uganda durante los años 60. En junio 1976 permitió que un avión de Air France secuestrado por el Frente Popular para la Liberación de Palestina aterrizara en Kampala. Allí permanecieron secuestrados 80 ciudadanos israelíes. Días después un comando enviado por Tel Aviv tomó el aeropuerto para rescatar a los tripulantes. Entre los muertos en el enfrentamiento estuvo Yonatan Netanyahu, hermano mayor del actual primer ministro israelí.
Para 1978 los días de Idi Amin estaban contados. Ya había ejecutado a sus ministros, otros se habían fugado y la crisis económica azotaba al país. Fue entonces que parte de sus tropas se amotinó. El dictador envío a las fuerzas armadas a sofocar el levantamiento y los sublevados huyeron a Tanzania. Amin acusó al gobierno tanzano del levantamiento y le declaró la guerra anexionándose la región de Kagera.
En enero de 1979 Nyerere movilizó la Fuerza de Defensa Popular de Tanzania y contraatacó junto con varios grupos de exiliados ugandeses. El ejército de Amin tuvo que retirarse y, a pesar de la ayuda militar de la Libia de Muamar Gadafi, el mandatario se vio forzado a huir al exilio en abril de 1979.
A lo largo de su vida Amin -que era polígamo- tuvo entre 30 y 45 hijos (no se sabe el número exacto). Quién llegó más lejos en política es Taban Amin, hijo mayor del dictador, que fue el líder del Frente de la Orilla Occidental del Nilo, un grupo insurgente opositor al gobierno del presidente Yoweri Museveni. En 2005 Museveni le ofreció la amnistía y al año siguiente lo nombro director general Adjunto de la Organización de Seguridad Interna.
Tras pasar por Libia e Irak, Amin se terminó estableciendo en Arabia Saudita, país que lo recibió hasta su muerte en 2003. Así, sin ser juzgado por sus crímenes, se fue el dictador-boxeador que practicó la política como alguna vez él mismo la definió: “Es como el boxeo, uno intenta siempre noquear a sus adversarios”.
Santiago Mayor – @SantiMayor
Si llegaste hasta acá es porque te interesa la información rigurosa, porque valorás tener otra mirada más allá del bombardeo cotidiano de la gran mayoría de los medios. NOTAS Periodismo Popular cuenta con vos para renovarse cada día. Defendé la otra mirada.