Educación y Ciencia

22 diciembre, 2015

Sacan el ingreso eliminatorio de la Facultad de Ciencias Médicas de La Plata

Luego de la reciente modificación de la Ley de Educación Superior que -entre otras cosas- impide los ingresos eliminatorios a las universidades, el movimiento estudiantil platense retomó con fuerza una de sus banderas históricas para que la Facultad de Ciencias Médicas elimine el examen que impedía a miles de jóvenes estudiar una carrera universitaria.

Luego de la reciente modificación de la Ley de Educación Superior que -entre otras cosas- impide los ingresos eliminatorios a las universidades, el movimiento estudiantil platense retomó con fuerza una de sus banderas históricas para que la Facultad de Ciencias Médicas elimine el examen que impedía a miles de jóvenes estudiar una carrera universitaria.

Ingresarán de esta manera alrededor de 3500 estudiantes a una Facultad que dejaba, hasta este año, a más del 75% de sus inscriptos afuera de la Universidad.

Durante la última sesión del año del Consejo Superior sucedido el 16 de diciembre pasado, y a partir de una presentación realizada por la consejera estudiantil por Ciencias Médicas, se aprobó por unanimidad una Ordenanza que regula los ingresos en todas las dependencias de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP). Entre otras cosas, la misma sostiene que «los sistemas de ingreso, cualquiera sea su forma, no podrán tener carácter selectivo, excluyente o discriminador”.

En simultáneo, en el Consejo Directivo de la Facultad de Ciencias Médicas, las autoridades de dicha facultad pertenecientes a la agrupación “Hoja de Roble” cedieron ante esta lucha histórica del movimiento estudiantil y aseguraronn la eliminación del curso de ingreso eliminatorio y la garantía de que los alrededor de 3500 estudiantes inscriptos comenzarán con el primer año de la carrera en el 2016.

El examen de ingreso en dicha facultad, impuesto a partir del año 1992, sustenta su aplicación en argumentos difícilmente demostrables: la disminución de la cantidad de estudiantes abonaría a una mejor formación y a la “excelencia académica”; la Facultad no contaría con el espacio necesario para recibir a más estudiantes de los que recibía (unos 300 por año); y la cantidad de cargos docentes de la planta actual sería insuficiente para abarcar un número mayor de inscriptos.

Durante este último año los estudiantes llevaron adelante una campaña que tenía como objetivo derribar esos mitos. Según datos oficiales de la Universidad de La Plata, en el año 1991 la Facultad de Ciencias Médicas tenía más de 17 mil estudiantes, un solo edificio y 714 docentes. El promedio de notas de los egresados hasta ese año era de 6,44 sobre 10. Por su parte, la Facultad en el año 2015 y luego de más de 20 años de políticas elitistas cuenta con 3787 estudiantes, cinco edificios y 1126 docentes. El promedio de notas de sus egresados es de 6,54 sobre 10.

De los números reales se desprenden muchas conclusiones: la Facultad tiene cuatro edificios nuevos, aumentó en 412 su planta docente, 13 mil estudiantes menos y un promedio casi idéntico de notas de sus egresados. Los datos son contundentes y los argumentos de las autoridades caen por si solos lo que invita a buscar otras respuestas a la hora de pensar el porqué de la defensa de los exámenes eliminatorios.

Poco antes de morir, Floreal Ferrara -médico sanitarista y militante popular del campo de la salud- sostuvo en una entrevista: “Nunca he visto cosa más dúctil, más enormemente esclavizada, más enormemente colonizada que la profesión médica, nunca. Sigue lo que le dictan los poderosos”.

La mayoría de las Facultades de Ciencias Médicas del país, con algunas interesantes e incipientes excepciones, se encuentran gobernadas por la corporación médica y por los laboratorios privados que sin duda ocupan un lugar de relevancia entre esos poderosos a los que se refería ex ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires. En el caso de La Plata, esos poderes concentrados encuentran en la agrupación Hoja de Roble su representación más genuina.

“No es de extrañar entonces que los planes de estudio y el perfil del profesional que forman unidades académicas como la nuestra busquen celosamente resguardar sus intereses de clase: se busca un trabajador de la salud que priorice su carrera individual, tecnicista, acrítico, patriarcal y por sobre todas las cosas ajeno a la realidad social y política de las personas que luego atenderá”, declaró Laura Cano, consejera superior por el claustro estudiantil en la sesión de Consejo Superior.

Las caras de felicidad colmaron el edificio de la Universidad el día de la sesión del Consejo. Posterior a eso, la Federación Universitaria de La Plata convocó a una conferencia de prensa con representación de todas las fuerzas políticas que habitan la facultad de Ciencias Médicas. En ella, la vicepresidenta del Centro de Estudiantes, Ayelén Escalente, remarcó: “Como venimos diciendo, esta batalla es un punto de llegada de muchos años de lucha, pero sobre todo es un punto de partida para todas las enormes e interesantísimas peleas que se nos vienen el año que viene».

Asimismo, la dirigente estudiantil añadió: «Esta victoria nos encuentra en pleno proceso de implementación de medidas antipopulares por parte del gobierno macrista, lo que nos sigue confirmando que el camino es la unidad en la lucha y la ampliación de la participación política para no retroceder ni perder nada de lo conquistado. Seguiremos, fieles a nuestras convicciones, militando por una Universidad Popular, y en nuestro caso, por la verdadera excelencia académica que nos merecemos y por una facultad que forme trabajadores y trabajadoras de la salud con conciencia de clase, solidarios, que luchen por la igualdad de géneros y que se organicen y defiendan la salud y a educación pública”.

Manuel Fonseca, desde La Plata

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