Un tenis hecho polvo

Como ya es sabido, el tenis argentino no atraviesa su mejor momento y eso quedó reflejado en Roland Garros, el segundo Grand Slam del año. Lejos quedaron las páginas doradas de “La Legión”, que fue una de las mejores generaciones de este deporte, y ahora se reza por la recuperación de Juan Martín del Potro, quien desde hace un tiempo lucha contra su muñeca para poder volver al circuito con regularidad y ser tan protagonista como antes de las operaciones.

Luego de las semifinales del 2004, donde de los cuatros clasificados tres eran argentinos -Gaudio (campeón), Coria (finalista) y Nalbandian- la arcilla de París comenzó a ser bastante esquiva para los sudamericanos. En estos tiempos, alcanza con llegar a la segunda semana de competencia. Si ese fuera el objetivo, ninguno lo cumple desde el año 2012 cuando Juan Mónaco (quedó afuera en octavos) y Juan Martín Del Potro (eliminado en cuartos) superaron esa barrera.

En esta edición, de los siete participantes, el que más lejos llegó fue Leonardo Mayer, que perdió en tercera ronda frente a un intratable Marín Cilic. El “yacaré” es hoy la mejor raqueta argentina y una de las esperanzas de cara al futuro, pero el croata -campeón del US Open en el 2014- lo dejó sin respuestas y le ganó por 6-3/6-2/6-4.

A pesar de las rápidas derrotas, dejaron muy buenas impresiones las actuaciones de Carlos Berlocq y Diego Schwartzman, quienes abandonaron el torneo frente a jugadores de mayor posición en el ranking y mucho mejor nivel de tenis. “Charly” perdió en un maratónico partido. Demostrando más carácter que juego, el oriundo de Chascomus llegó al quinto set (que se jugó al otro día por falta de luz) pero no le alcanzó frente al francés Richard Gasquet que avanzó luego del 3-6/6-3/6-1/4-6/6-1 a su favor.

Por su parte, el “Peque” Schwartzman tuvo un brillante partido y puso contra las cuerdas a otro local, Gael Monfils, pero la “pantera” reaccionó a tiempo y lo venció también en cinco sets (4-6/6-4/4-6/6-2/6-3). Sin embargo, quedará un gran recuerdo para el argentino que se retiró aplaudido por todo el estadio “Phillipe Chatrier” luego de su buena exhibición.

El otro argentino que podía llegar a pasar un par de rondas más era Juan Mónaco, pero el de Tandil también se quedó en la segunda tras perder frente a Teymuraz Gabashvili en sets corridos (6-3/6-4/6-2).
Los restantes argentinos tuvieron sus despedidas en el partido debut: Federico Delbonis perdió frente a “Pico” Mónaco, Máximo González contra Dusan Lajovic y Facundo Argüello se dio el lujo de caer ante Andy Murray.

Aunque ya no queden argentinos, el Roland Garros sigue teniendo grandes atractivos como por ejemplo el enfrentamientos en cuartos de final entre Rafael Nadal, nueve veces campeón de este torneo, y Novak Djokovic, número uno del mundo. Hasta ahora no hubo sorpresa en la arcilla parisina, siguen en carrera siete de los ochos mejores preclasificados del ranking mundial (Berdych perdió frente a Tsonga). La definición será para “alquilar” balcones ya que casi con seguridad se verá un tenis de alto vuelo.

Juan Cruz Carrasco – @juanccarrasco6