El primer día de Syriza en el gobierno

El acuerdo y la asunción de Tsipras

Poco antes de las 4 pm de este lunes en Grecia (a las 11 am de Argentina) asumió Alexis Tsipras como primer ministro. El presidente Karolos Papoulias le tomó juramento al nuevo mandatario que aseguro por su «honor y conciencia» que defenderá la Constitución y las leyes. Posteriormente, al salir del palacio de gobierno, se dirigió al monumento a los caídos en Kesarianí donde dejó una ofrenda floral en memoria a los comunistas fusilados por los nazis en 1944.

Previamente a su asunción Tsipras, que el domingo no había obtenido aún los 151 escaños necesarios, se reunió a las 7 am con el líder de ANEL (Griegos independiente) y logro su apoyo para ser elegido al frente del país. El partido nacionalista de derecha que rechaza a la troika y que ha obtenido 13 escaños permitió que Syriza logre un total de 162 votos en el parlamento. Su líder Panos Kammenau, un ex integrante de Nueva Democracia, no anunció en que consistió el acuerdo y sostuvo que la composición del nuevo gobierno será anunciada por el nuevo primer ministro.

Luego de reunirse con el dirigente de ANEL, Tsipras también lo hizo con Stavros Theodorakis de To Potami que había logrado ser la cuarta fuerza electoral. A pesar de que el partido europeísta no apoyará al nuevo gobierno su líder declaro que su conformación «no es un mal augurio» y que «es una gran oportunidad para que el país dé una vuelta de página».

Antes de dirigirse al palacio presidencial, Tsipras también se reunió con el arzobispo de Atenas para comunicarle que no hará ningún juramento religioso. El nuevo mandatario es el primero en la historia del país en hacer un juramento civil.

La poca cortesía del antiguo gobierno de Nueva Democracia también fue un dato del día. El mandatario saliente, Antonis Samaras, no fue quien le tomó juramento al nuevo primer ministro. Un episodio similar se dio también cuando tuvo que hacerse la tradicional entrega de la Mansión Maximos (la residencia oficial). Cuando se hizo el traspaso en la Mansión no había nadie y el tramite lo terminaron llevando adelante los secretarios del mandatario saliente y el del nuevo gobierno.

Entre diarios, presidentes y «mercados»

Crhistine Lagarde, la directora-gerente del FMI, luego de señalar que dialogará con el nuevo gobierno descartó una posible quita de la deuda griega. En una entrevista publicada por el diario Le Monde sostuvo que «hay que respetar las reglas internas de la zona euro». Declaraciones similares venía haciendo en las últimas semanas la canciller alemana Angela Merkel. El mismo domingo el presidente del Bundesbank, había salido a repetir esas «advertencias». Desde España, Pablo Iglesias de Podemos le contestaba que en Grecia el Bundesbank no se presentaba a elecciones.

En España la elección en Grecia se ganó todos los titulares de los periódicos. El diario El Mundo tituló «Grecia desafía a la troika», El País «La victoria de Syriza anticipa un periodo de agitación en Europa» y en su bajada se podía leer «Rajoy advierte a España de ‘no jugar a la ruleta rusa’ con Podemos». Por su parte ABC titulaba que «El populismo se apropia de Grecia».

En Francia pareciera que todos festejaron -o se quisieron apropiar del triunfo-. El mandatario Francois Hollande felicitó a Tsipras y sostuvo que busca mantener las históricas buenas relaciones entre ambos países. Marine Le Pen, que logró ganar con su partido de ultraderecha las últimas elecciones para el parlamento europeo, también celebró los resultados en Grecia. Ella considera que se trata de un tremendo golpe para las políticas de austeridad que toman quienes pretenden salvar al euro.

Obviamente, los que más festejaron el triunfo de Syriza fueron los integrantes del Frente de Izquierda que junto a los griegos conforman el Grupo Confederal de la Izquierda Unitaria Europea. Su líder Jean-Luc Mélenchon declaró: «Espero que en Francia seamos capaces de crear un impulso comparable al de Syriza en Grecia. La suerte del PS ya está decidida, es una cuestión de tiempo».

Vladimir Putin como presidente de Rusia, que es uno de los principales socios comerciales de Grecia, envió sus felicitaciones al nuevo primer Mministro. Sobre el gobierno ruso se ha especula que podría salir en apoyo de Grecia en caso de que intenten expulsarla de la zona euro. Esa hipotética situación no sería nada favorable para la troika.

A su vez, desde la Casa Blanca se emitió un comunicado en el cual Estados Unidos promete que «continuara apoyando los esfuerzos del pueblo griego».

El 26 de enero los «mercados» también se movieron en función de lo que pasaba en Grecia. En las primera horas del día cuando aún no había asumido Tsipras el euro se devaluaba 0,4% respecto al dólar y la bolsa de Tokio caía. Pero durante el día las bolsas europeas fueron remontando las pérdidas iniciales y culminaron subiendo. La única excepción fue la bolsa de Atenas que abrió con una caída del 5% y cerró con una baja del 3,2%.

Una tranquila incertidumbre

El domingo por la noche, Tsipras frente a la Universidad de Atenas, no bajó ni un ápice los planteos que había sostenido a lo largo de su campaña electoral. El ahora primer ministro sostuvo que el país dejaba en el pasado la humillación que ha sufrido durante los últimos años siguiendo las políticas de austeridad de la troika. Pronosticando lo que viene, sostuvo que «no habrá desastre ni sumisión».

Que Syriza haya preferido el apoyo de una fuerza más de «derecha» que de «centro», más que tranquilizar a los que prefieren una posible moderación de la Coalición de Izquierda en el gobierno, debería preocuparlos. El acuerdo con una fuerza nacionalista que rechaza la subordinación a la troika como ANEL, a diferencia de lo que hubiera sido pactar con una fuerza «europeísta» como To Potami, fortalece la posición de Syriza para futuras negociaciones en torno a la deuda externa.

Una declaración que marca lo que fue el día lunes es la que realizó el vocero del nuevo partido de gobierno Panos Skourletis a los medios cuando sostuvo que en Grecia, «el sol brilla, los cajeros dan dinero, la gente va a trabajar». Aquellos que pronosticaban el caos en Grecia en caso de que ganara Syriza fueron parcialmente derrotados durante el primer día de gobierno.

Por su parte, el pueblo griego aún celebra . Millones de griegos, y especialmente la juventud, expresan su alegría y esperanza. Hasta las canciones del movimiento de resistencia contra la ocupación nazi, como también La Internacional, se escucharon en el centro de Atenas el domingo expresando que en Grecia, con el triunfo de Syriza, se revivían las históricas luchas populares.

Lucas Villasenin – @villaseninl