Europa

26 mayo, 2014

El rey del chocolate nuevo presidente de la Ucrania dividida

Piotr Poroshenko, magante ucraniano con varias empresas productoras de chocolate fue electo presidente este domingo en el medio de elecciones de dudosa legalidad debido a la guerra civil que se desarrolla en el este del país. El nuevo mandatario ratificó la política llevada adelante hasta el momento por el gobierno golpista.

Piotr Poroshenko, magante ucraniano con varias empresas productoras de chocolate fue electo presidente este domingo en el medio de elecciones de dudosa legalidad debido a la guerra civil que se desarrolla en el este del país. El nuevo mandatario ratificó la política llevada adelante hasta el momento por el gobierno golpista.

El nuevo presidente de Ucrania obtuvo más del 50% de los votos en los comicios realizados este domingo en Ucrania. De esta forma obtuvo el apoyo necesario para ser proclamado ganador en la primera ronda ya que, si bien todas las encuestas le daban una amplia ventaja, no estaba seguro que superara la mitad más uno de los sufragios necesarios para vencer.

En segundo lugar quedó, lejos, la ex primera ministra (presa por corrupción) Yulia Timoshenko con poco más del 12% y tercero Oleg Liashko (8%).

Dueño de activos valorados en mil 300 millones de euros, el nuevo presidente surgido en medio de la crisis originada por el golpe de Estado del 22 de febrero, reiteró su fidelidad a los designios de Estados Unidos al anunciar quién será su primer ministro.
Consideró que la colaboración con el actual presidente Arseni Yatseniuk, “podría ser eficaz”. “Lo espero y, por tanto, no tengo planes de cambiar el presidente del Gobierno”, afirmó Poroshenko ante la prensa. Yatseniuk fue siempre el predilecto de Washington para encabezar el Ejecutivo ucraniano, según trascendió en medio de las protestas previas al golpe durante una conversación telefónica filtrada en internet entre la subsecretaria de Estado Victoria Nuland y el embajador norteamericano en Kiev.

A su vez sostuvo que “el diálogo con Rusia es muy importante, pero es fundamental que se ejecute a través de la mediación de Estados Unidos y la Unión Europea”. Esta declaración no fue ignorada por Rusia que respondió a través de su canciller Serguei Lavrov: “Estamos preparados para un diálogo con Poroshenko”, pero “Moscú no necesita intermediarios”.

El magnate del chocolate, que fue uno de los principales impulsores del golpe de Estado, ratificó en su discurso la política pro europea que prometió en campaña. «Haremos todo lo posible para ayudar a construir una Ucrania fuerte y europea y celebrar finalmente un referendo sobre el ingreso en la OTAN», dijo.

Finalmente, adelantó que su primer viaje oficial será a Donetsk, una de las dos regiones del este del país que declararon su independencia tras el golpe de Estado de febrero. «Ucrania debe ser un Estado unitario», sentenció.

Las elecciones en el este

Tal como habían anticipado, los gobiernos de las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk desconocieron los resultados. En ambos distritos se encuentran 5 millones de los 32 millones de habitantes del país.

Además, en el medio de la guerra civil y la ofensiva militar del gobierno central sobre estas regiones, prácticamente no hubo votación. Más de la mitad de los colegios no estaban habilitados para el sufragio en Donetsk y en Lugansk, de 12 comisiones, ocho no funcionaban.

Es que la nueva mayoría parlamentaria impuesta tras el golpe de Estado modificó la ley electoral de Ucrania de manera que los comicios puedan validarse con independencia de la cifra de colegios o mesas de votación.

El jefe del Gobierno provisional de la República Popular de Donetsk, Denis Pushilin, consideró que cualquier tipo de negociaciones con el nuevo gobernante de Ucrania sería posible «solo en presencia de mediadores» en alusión a Rusia. Además sostuvo que “cuando a uno lo eligen presidente, siempre se propone visitar primero un país vecino. Consideramos desde esa perspectiva su idea de visitarnos”, aseguró Pushilin citado por la agencia Novosti.

Todo esto mientras persisten los combates y la imposibilidad del gobierno ucraniano de retomar el control sobre las regiones que cada vez se muestran más hostiles. La fuerza de las milicias populares de Donetsk y Lugansk está en su mayor conocimiento del terreno y el método de guerra de guerrillas por el cual impiden el desenvolvimiento eficaz de las tropas ucranianas.

 

Si llegaste hasta acá es porque te interesa la información rigurosa, porque valorás tener otra mirada más allá del bombardeo cotidiano de la gran mayoría de los medios. NOTAS Periodismo Popular cuenta con vos para renovarse cada día. Defendé la otra mirada.

Aportá a Notas