América Latina

23 mayo, 2014

Bolivia: hacer comunicación en un Estado plurinacional (2)

Segunda parte de la entrevista a Gustavo Portocarrero, gerente general de la televisión pública Bolivia TV, en el marco del Encuentro de Medios Públicos de América Latina (EMPAL) realizado la semana pasada en Mar del Plata.

Segunda parte de la entrevista a Gustavo Portocarrero, gerente general de la televisión pública Bolivia TV, en el marco del Encuentro de Medios Públicos de América Latina (EMPAL) realizado la semana pasada en Mar del Plata. En esta entrega, analiza el rol de los medios públicos en función de romper con la manipulación de la información ejercida por las grandes empresas mediáticas en Latinoamérica.

– ¿Cuál es tu punto de vista sobre la libertad de expresión relacionada a la transparencia y sobre la libertad de empresa?

– La libertad de expresión tiene un punto de partida hegemónico. Porque lo que ha hecho el imperialismo es mostrar sólo una forma de ver la verdad. El Sol no sale a la misma hora en todas partes. A veces, la verdad la podemos ver muy metafóricamente pero la realidad de la vida, no. Hay que observar lo que pasa en nuestros países, el movimiento social, lo que pasa en la calle; pero no a través de los ojos de los factores hegemónicos, que son los grupos que manejan todo.

Siempre recuerdo aquel discurso de Franklin Roosevelt, en el año 1932, cuando dijo: “Donde vaya nuestro cine, irá nuestra cultura y con ella nuestras capitalizaciones”. Hollywood es la gran industria de todo esto. Y la libertad de expresión de los medios hegemónicos tiene vinculación exacta, ellos muestran el punto de vista que quieren desarrollar para provocar una variante de esa verdad que se vive.

Me parece que la libertad de expresión existe, nadie la puede coartar en el sentido real de la situación. Aunque no es falso tampoco que los medios privados tienen posiciones poco claras respecto de las verdades porque siempre las desarrollan a partir de la falta de expresión. Los medios públicos intentamos tener todas las voces; expresar lo que las personas quieren; los sentimientos que los movimientos sociales reflejan, porque son parte de un arte que debe llevar el sentir del pueblo.
Claramente, ahora hay un enfrentamiento constante medios públicos versus privados, porque los primeros ya no hacen lo que quieren los últimos. Dominar a la sociedad en su totalidad.

– ¿Por qué crees que algunos grandes grupos mediáticos de la región decidieron intervenir políticamente en Venezuela y atacar constantemente el gobierno y su gestión?

– Es una conjunción de fuerzas. Pero lo cierto es que nosotros hemos estado presentes en la historia de Venezuela y hemos podido ver la realidad de ese marco social que te invita y reclama participación para una libertad latinoamericana. Es un sentimiento de todo el continente. Y lo novedoso es que el reclamo ante los que atacan al gobierno venezolano no es de un país solo sino de un bloque. Lo que pasa es que en todos los países de América Latina existen movimientos que te invitan a liberarte y ese convocar constante de la comunicación a luchar por esa realidad tiene que ser provocado en todos los medios.

A mediados de marzo la oposición venezolana se alío con más de 80 diarios tradicionales de Latinoamérica, agrupados en tres grandes grupos mediáticos, para publicar contenidos de la situación política en Venezuela con el argumento de que hay censura y que no existe la libertad de expresión. Andiarios, Grupo de diarios de las américas y Periódicos asociados latinoamericanos fueron los responsables de la consigna «todos somos Venezuela: sin libertad de prensa no hay democracia».

Lo peor es que gran cantidad de la población aún no tiene conocimiento de quienes están detrás de estas empresas de medios y mucho menos qué intereses manejan, quiénes son sus dueños, sus accionistas y para quienes operan.

– Para adelantarnos un poco a los acontecimientos de junio, ¿cómo va a ser la cobertura de Bolivia, siendo el país anfitrión del G77 + China?

– Se transmitirá todo lo relacionado con el evento a través de la página web, a nivel satelital, para que todos puedan acceder a la señal gratuitamente. Obviamente, nuestras televisoras aliadas del continente tendrán la prioridad a la hora de la cobertura.

– ¿Cómo es la distribución geográfica en Bolivia en relación a los medios públicos y privados?

– Los aparatos fuertes están concentrados en ciudades como La Paz y Santa Cruz. Los sistemas de cable privados no llegan a las áreas rurales donde hay buena cantidad de habitantes, ni tampoco a ciudades como Cobija o Beni, con gran densidad poblacional. La sociedad consigue los cables a través de cooperativas, que son otros grupos que se encargan de tener sus canales de TV privados y que no ven nada bueno en lo que hace el gobierno. No obstante, en la grilla del cable están los canales del Estado por lo que la gente no tiene dificultades en ver las dos campanas. Todavía no contamos con una ley de medios, solo de telecomunicaciones, en la que se está trabajando para el desarrollo de la televisión digital.

– ¿Esa ley se encarga de hacer un relevamiento del contenido que se proyecta?

– No, porque esta la hace el ministerio de Comunicaciones, que tiene apenas tres años. Hay un esquema formal de trabajo que fue un pedido de los movimientos sociales del país. Entonces medios, sectores sociales y entes gubernamentales se deben unir para cuadrar esta ley.

Seguro próximamente se trabajará en una ley para medios donde se controle el contenido porque si se ve cualquier canal boliviano privado el 80% de su programación debe ser enlatado y sin casi nada de producción nacional. Tienen programas de estudios, que son shows y eso en realidad no es algo que haga compartir el pensamiento de las personas. Mi idea es que la ley de contenidos se termine de cerrar el año próximo.

 

Bárbara Montilla – @barbaramontilla

 

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